viernes, 6 de febrero de 2015

¿Y si tiro la toalla?

Cuando empezamos este camino de educar sin escuela no sabíamos exactamente como transitaríamos este recorrido ni todos los cambios que como familia eventualmente tendríamos. Sin duda ha sido una senda bella, llena de aprendizaje, de desventuras pero sobre todo llena de amor.
No siempre todo fluye como quisiéramos ni es "pan comido".

Hemos vivido el cambio a una nueva Cd, el que yo me incorpore a trabajar, reorganizar tareas y la llegada de ¡¡La ADOLESCENCIA!!!

Quien diga que la adolescencia de sus hijos le ha sido fácil le pido que me diga como lo hizo porque con todos los que yo he hablado hasta el momento, las respuestas han sido contrarias.

Voy a abrir mi corazón. Casi siempre leemos en estos sitios de lo maravilloso que ha sido, mostramos el lado bello; y en efecto lo es. Pero hoy voy a hablar del lado TENEBROSO Y OBSCURO (jajajaja).

Al punto que he reconsiderado en muchas ocasiones tirar la toalla. Si, tirar la toalla. Llegamos a una Cd. en la frontera que tiene fama de violenta y la inseguridad no invita a nadie a pasear. Todo cambio cuando los chicos sintieron la pérdida de sus amigos, lugares a los que podían asistir en una ciudad tan bella como lo es Monterrey, México. Sus actitudes y peleas de hermanos aveces arruinan los momentos de estudio o de convivencia. La ola de emociones en momentos viene como una marejada que quiebra el momento, pero en otros momentos la paz y quietud se respiran como siempre.

Hoy por la mañana orábamos juntos y al escucharlos hablar y entender tantas cosas acerca de su seguridad en Dios y lo bendecidos que se sienten con todas las cosas que tienen, a pesar de la pérdida de su anterior "zona de Confort". Nuestra reflexión grupal era que no podíamos dejarnos llevar por el "Punto negro" en medio de tantas bendiciones. Han sido días de mucha violencia en la Ciudad donde vivimos y recordamos que Dios tiene control de nuestras vidas hacemos un nuevo camino que al no haberlo recorrido nos atemoriza sin duda. Pero Vuelvo a ver que NO ESTAMOS SOLOS  que es mucho más lo ganado en este recorrido.

"No decaigas aunque el viento sople. Camina mirando a tu Creador sobre las aguas, que Él calmará la tormenta"

¡Con amor para Mis tres chicos!

"Pero tenemos este tesoro en vasijas de barro para que se vea que tan sublime poder viene de Dios y no de nosotros. Nos vemos atribulados en todo, pero no abatidos; perplejos, pero no desesperados"
2 Corintios 4:7-8


Por mariana Herrera